En la producción de aceite de sésamo, cada paso del proceso influye directamente en la calidad, estabilidad oxidativa y aceptación del mercado. Las empresas que buscan diferenciarse deben entender no solo “qué se hace”, sino también “por qué” y “cómo hacerlo mejor”. Este artículo desglosa la cadena de valor completa —desde la limpieza de semillas hasta la refinación— con un enfoque especial en el control térmico, clave para evitar rancidez prematura y preservar el aroma característico.
Según datos de la Asociación Internacional de Aceites (IOI), más del 60% de las pequeñas y medianas fábricas de aceite en África y Asia aún usan métodos manuales o semi-automatizados. Esto afecta tanto la eficiencia como la uniformidad del producto. La secuencia ideal incluye:
“La temperatura es el mayor factor de riesgo para la oxidación prematura del aceite. Un aumento de solo 10°C puede reducir la vida útil del producto en un 30%.” – Dr. Elena Martínez, Instituto Tecnológico de Alimentos (ITC)
| Característica | Prensado en frío | Prensado caliente |
|---|---|---|
| Temperatura operativa | ≤ 45°C | ≥ 80°C |
| Rendimiento (%) | 65–70% | 80–85% |
| Aroma y nutrición | Más intensos, conserva fitoquímicos | Menos aromático, pérdida de vitaminas E |
Para mercados premium como Europa o Japón, el prensado en frío es una ventaja competitiva clara. Pero si tu objetivo es escalar producción con costos controlados, el método caliente combinado con control térmico preciso puede ofrecer resultados similares en estabilidad oxidativa —si se aplica correctamente.
¿Te has encontrado con problemas de olor rancio en tus lotes recientes? Puede ser un indicador de mal control térmico durante la refinación. ¡No subestimes este detalle!
Empresas como SesameTech Solutions han reportado hasta un 40% menos de variabilidad en el punto de humo después de implementar sensores de temperatura en tiempo real. Esto no solo mejora la confiabilidad del producto, sino que también facilita el cumplimiento de normativas internacionales como ISO 22000 o HACCP.
¿Cómo empiezas si eres una pequeña fábrica? Comienza con un sistema básico de monitoreo por PLC + software de registro automático. Inversión inicial: $2,500–$5,000 USD. Retorno esperado en 6–9 meses gracias a menor desperdicio y mayor certificación de calidad.
La innovación no tiene que ser cara ni compleja. A veces, es simplemente cuestión de entender lo que ya tienes y usarlo mejor.
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